BUENOS AIRES.- En la sala de prensa del Estadio Único de La Plata, después del partido Argentina-Bolivia, una marca de electrónicos eligió al mejor jugador de la cancha. Quizá por una decisión más cercana al marketing que al rendimiento deportivo, optó por una fija: Lionel Messi. El jugador de Barcelona durante el segundo tiempo fue anulado por la marca rival.
A los 25 minutos, Sergio Batista hizo un cambio cantado: Sergio Agüero por un errático y excesivamente individualista Ezequiel Lavezzi, que no logró gravitar durante todo el partido. Al "Kun" le bastaron sólo cinco minutos en la cancha para lograr el empate, con una volea inatajable para el arquero Carlos Arias. En esos momentos, Argentina tenía un síndrome parecido al del River de las últimas fechas: el del nerviosismo y la desesperación que nublan la vista y no dejan imponer el juego.
En una encuesta realizada por LAGACETA.COM, el hombre del Atlético de Madrid fue elegido como la gran figura del primer partido de la Copa América. Luego del empate, el yerno de Diego Maradona contestó fiel a su estilo, quitándole dramatismo al opaco debut ante la conjunto boliviano. "El equipo debe seguir mejorando y corrigiendo pequeñas cosas. El grupo debe estar bien para el próximo partido ante Colombia", comentó, a la salida del vestuario, antes de regresar al predio de Ezeiza.
En La Plata, antes de iniciar el partido, muchos pensaron que Bolivia iba a hacer un rival accesible para la Argentina. Pero el equipo del argentino Gustavo Quinteros, ordenado y prolijo, se encontró con un gol. Aunque siempre hay dos o tres equipos al que todos califican como candidatos, Agüero piensa que en el fútbol de hoy, tan competitivo, no existen más los equipos accesibles.
"En estos momentos, no hay rivales fáciles. El fútbol se volvió difícil. Fijate que Bolivia se cerró muy bien atrás. Con el correr de los minutos, el partido se nos fue complicando", analizó el ex Independiente.
Luego del partido con Bolivia, un diario deportivo título: "estamos verdes", en alusión al color de la camiseta del vecino país y a la inmadurez del equipo de Batista. El "Kun" también cree que al equipo le falta crecimiento. Y confía en que lo logrará con el correr de los minutos en el torneo. "No pasa nada por el empate. El equipo hizo lo mejor que pudo, pero no tuvimos mucha suerte en las llegadas", finalizó el hombre nacido en el partido bonaerense de Quilmes.
Por último, se refirió a la rígida marca que los bolivianos pusieron sobre Messi. "Tenía uno encima todo el tiempo. A Leo se le complica jugar de esa manera; yo lo he vivido otras veces y sé que eso no le hizo bien a Leo. Ahora hay que respaldarlo y ayudarlo", recalcó.
En tres días, Argentina enfrentará a Colombia, que viene de ganarle a Costa Rica. ¿Qué hará el director técnico? ¿Insistirá con el "Pocho" Lavezzi o probará con el "Kun"? ¿Tocará el mediocampo?
En las tribunas del estadio de La Plata, entre las tantas banderas, había una que decía: "Tévez+10". Otros, con razón, pensarán que la Selección es Messi y el resto de los jugadores. Pese a que el público fue frío con el equipo luego del empate ante Bolivia, el autor del gol se ganó muchos aplausos en La Plata. Por movilidad y efectividad, el "Kun" salvó el partido. Esta vez, fue "Agüero+10".